Retumbar de trenes

En el año ’29 –y evocando respetuosamente la gesta del patriarca Abraham– el joven David Balzer deja su hogar familiar, en un pequeño pueblo polaco y parte hacia la remota Argentina. Basavilbaso y la colonia Las Gamas en la provincia de Entre Ríos, los barrios del Abasto, Villa Crespo y Chacarita, en Buenos Aires, serán los hitos del recorrido de David en ésta, su pretendida “tierra de promisión”. Vendrán los tiempos de la guerra mundial, del impiadoso holocausto en Europa y de los hechos políticos locales protagonizados por  Perón, Evita, Frondizi y los gobiernos militares. Habrá una sucinta carta desde Polonia y, mucho después, habrá un insospechado encuentro. Balzer vive en una casa a pocos pasos de las vías del tren. Muy cerca, también, de la sede central de su empresa comercial.

Enrique Amster nació en la provincia de Entre Ríos y reside en la Capital desde los nueve años de edad. Estudió construcciones en una escuela industrial y luego arquitectura en la Universidad de Buenos Aires. En tanto desarrollaba su actividad profesional diseñando inmuebles para vivienda, realizó estudios de postgrado en planificación física y regional. Participó en equipos interdisciplinarios públicos y privados, formulando diversas propuestas de ordenamiento urbano especialmente en sectores de tránsito y transporte. Su vocación literaria se fue manifestando de a poco entre otros intentos expresivos: el dibujo y la pintura. Es a partir de la práctica en seminarios de periodismo y en talleres literarios, que la escritura fue elegida finalmente como el medio idóneo que le permitiera decodificar los mensajes ocultos en su mundo interior. Ha publicado narrativa en antologías y una novela, Marcela y Judith, en el año 1999.